19 de Julio 2015
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La vista nocturna de la isla desde los aires siempre causa sorpresa a todos a bordo del avión.
Lo pintoresco y colorido de la Isla de Flores resalta desde cualquier ángulo, pero la vista justo antes de aterrizar siempre es un regalo visual y un descanso, más cuando viajas de noche.
Existen vuelos diarios a Petén desde la Ciudad de Guatemala por la mañana y por la tarde. De esta manera puedes disfrutar de una magnífica vista de la selva petenera que esconde un pasado rico en historia maya.
Refrescante llegada nocturna
Cuando viajas de noche el paisaje selvático no se puede apreciar, esto puede impacientar al turista más inquieto.
Entonces la voz del capitán anuncia abrocharse el cinturón porque comienza el descenso...
Los pasajeros cierran sus libros o revistas y se asoman a la ventana con curiosidad esperando ver las primeras vistas de Petén.
La noche esconde la sorpresa y de apoco ves un par de nubes mientras desciende el avión. De repente se aclara la vista y se aprecia la Isla de Flores justo antes de ingresar al aeropuerto.
Es fascinante ver turistas extranjeros (nuestros invitados eternos en Guatemala) sonreir con sorpresa al ir aterrizando mientras vel el paisaje, las luces de la ciudad y la Isla de Flores rodeada del Lago Petén Itzá.
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