Es uno de los iconos arquitectónicos de La Antigua Guatemala, se ubica frente al Parque Central hacia el norte sobre la 4a Calle Poniente, que es la que sale de La Antigua Guatemala y lleva de regreso a la capital.
Posee una estructura de corredores en dos niveles sostenidos y decorados por columnas y arcos, similar al Palacio de los Capitanes. Se distingue por su "banca larga", un espacio para sentarse a lo largo de su corredor principal permitiendo contemplar toda la escena del Parque Central y la Catedral de San José.
Alberga las oficinas en funciones de la Municipalidad de La Antigua Guatemala.
Es el sitio preferido para pasar la tarde sin perderse un solo minuto lo que pasa en las calles o el panorama del Volcán de Agua que queda justo al frente. La iluminación por la noche es muy agradable y le da un toque único al edificio.
Su construcción inició en 1740 y tres años después fue inaugurado. Al igual que el Palacio de los Capitanes cuenta con gruesas y sólidas columnas que resistieron muy bien los terremotos que dañaron otras construcciones. Ha sido durante años (desde el establecimiento de la ciudad colonial), un protagonista y testigo de la historia de La Antigua Guatemala, pues a la usanza tradicional: los eventos más importantes se llevaban a cabo en el Parque Central, Palacio de los Capitanes, o bien en este mismo edificio de ayuntamiento.