Ascensos de asalto

19 de Julio 2015

El montañismo no siempre significa subir un volcán o montaña con una carpa y mochila atestada de equipo. Según la dificultad del ascenso, el clima, o según nuestra condición física, los ascensos de subir y bajar en una sola mañana, tarde o el día completo, son también parte de la experiencia.

Los ascensos de asalto no tiene nada que ver con robos, sino subir, frecuentemente volcanes, en un solo día sin acampar. Algunos volcanes son los suficientemente sencillos en dificultad como para que se pueda subir y bajar el mismo día sin mayor equipo. Incluso, conforme avanzamos en experiencia y condición física, puede que comencemos a realizar ascensos de asalto a volcanes más altos, como el Acatenango, Tajumulco o Tacaná, que son los tres más altos de Guatemala.

El equipo

Te puedo recomendar una lista de cosas que no debes olvidar al hacer un asalto al volcán. La lista puede variar según la necesidad o dificultad del volcán y comprende, desde una lata de atún, hasta mantas térmicas. Hablemos primero de ascensos fáciles.

Importante, antes de comenzar

La dificultad es relativa a tu condición física, entonces la base para medirla será la accesibilidad del terreno, el clima y cuánto tiempo nos lleva subir y bajar considerando un tiempo para comer y un par de descansos. Como base, todo ascenso de asalto debe comenzar temprano por la mañana con buena claridad.

Ascensos fáciles y sencillos

Son lugares accesibles que ofrecen poca dificultad y reto físico. Para estos, que generalmente te requieren una mañana, requerimos solamente de agua, comida ligera como barras o granola, o un sandwich. Esto basta.

Pero siempre hay que incluir lo básico para heridas, como desinfectactes, también una navaja, un cordino (trozo de cuerda delgada pero resistente), protector solar, gorra y dulces. Considera cantidades de agua y comida adecuadas como para brindar ayuda a alguien.

Algunas veces el terreno puede requerir que te aventures en partes menos accesibles, y los cordinos son de gran ayuda. Te recomiendo la línea que se utiliza en paracaidísmo. Es como de amarrar zapatos pero resiste el peso de una persona.

Insolación y deshidratación

Frecuentemente son los problemas básicos, pues el sol puede castigarte fuertemente. Para eso es necesario contar con buena cantidad de agua y proteger bien tu cabeza. Subir sin camisa, y sin gorra, solamente te deshidrata más rápido. Por eso en el medio oriente, a pesar del calor, usan trozos de tela en la cabeza, pues evita la evaporación excesiva de agua.

Ascensos de asalto más difíciles

Acá no debes considerar en tu equipo las provisiones para los demás. Claro que deberán compartir, pero es primordial que cada persona lleve su propio equipo, porque cuando las cosas se ponen color de hormiga... ni la comida ni el agua alcanzan.

Este tipo de ascensos son los que usualmente requerirían acampar para descansar y comer, por lo que debes, en asalto, considerar solamente subir con alguien que tenga igual o mejor condición física que vos, y conocer bien el camino y la dificultad aproximada.

Es importante programar la agenda de subir y bajar, considerando un excedente de tiempo en caso hubiera un retraso, es decir, si consideras subir y bajar a las 8 de la noche... estás arriesgándote mucho a menos que seas conocedor del terreno, como experto.

Hay que recordar que los accidentes suceden y que perderse nos pasa a todos, y a veces no tiene nada que ver conocer o no el camino. INFORMATE del estado de salud de las personas con quienes subís, porque pueden sabotear sin querer el ascenso y poner al grupo en riesgo.

Es importante, en recorridos largos, agregar al listado anterior, lo siguiente:

Un hidratante, ya sea en polvo o líquido. Aspirinas para ayuda en el caso de mal de montaña, pues ayudan a la presión sanguínea. De igual manera un silbato. Son muchas las historias de grupos que se han perdido y que luego de horas de camino logran divisar a una persona, y haciendo señales y gritos les contestan “adiós” alegremente... un silbato se escucha mucho más lejos que los gritos.

Igualmente se debe llevar una linterna en caso algo retrase el recorrido, comida, especialmente alta en carbohidratos para dar energía rápidamente. Los hidratantes ayudan a reponer las reservas de postasio y sodio y así, combatir los calambres.

Algo muy imporante es llevar siempre una chumpa impermeable, pues te mantendrá seco y limpio, y al pasar la noche a la interperie, en caso de emergencia, la chumpa y una manta térmica serán de gran ayuda.

Las mantas térmicas no ocupan más espacio que tu billetera, son metalizadas y reflejan el calor evitando que escape. Los fósforos son vitales también, pues no hay nada como una noche sin carpa y sin fuego. La luz ayuda a ser ubicado en caso de perderse.

Los ascensos de asalto suelen ser subestimados y frecuentemente se pierden grupos enteros. Considera siempre que por un doblón de pie, a qué velocidad harían el recorrido en tu grupo cargando a alguien o auxiliándolo.

Y por último, el clima. Este puede favorecer o empeorar las cosas. Se la lluvia y el frío que conlleva, como la falta de visibilidad que trae la neblina.

Estos son solo consejos básicos, pues la lista crece fácilmente, pero son lo vital a incluir en un ascenso, lo mínimo.

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